La coma representa en la escritura una pausa breve que se hace al
hablar o leer. También sirve para organizar sintácticamente la frase. Se
escribe pegada a la palabra que la precede y separada por un espacio de la
palabra o signo que la sigue.
Utilizaremos la coma, entre otras muchas otras posibilidades:
-
Para
separar palabras de una enumeración dentro de un mismo enunciado:
Me gusta la pasta, la ensalada, el pescado…
He comido pasta, ensalada y pescado.
-
También
se utiliza para especificar dentro de una oración:
Mi vecino, Antonio, se va a trasladar.
Claudia, la hija de Luis, vendrá mañana al cole.
-
La
utilizaremos para nombrar a alguien y pedirle algo:
Juan, cierra la ventana.
¿Me puedes decir, Jacinto, quién falta?
-
Usaremos
comas cuando queramos explicar algo y usemos las expresiones “es decir”, “por
ejemplo”, “sin embargo”…:
Ayer, al parecer, te fuiste de compras.
- Cuando escribimos la fecha, pondremos la coma después del día de
la semana:
Hoy es lunes, 7 de agosto.
- Para no repetir el verbo en oraciones en las que se repite:
Su hijo pequeño es Marcos; el mayor, Ramón.
Mi madre tiene 35 años; mi padre, 37.
- Otros ejemplos de casos en los que usamos comas:
o Ve al cole, recoge a los
chicos, compra merienda, y llévalos al partido.
o
Puedes coger la cámara,
pero ten mucho cuidado.
o
Prometiste ayudarme, así
que ponte en marcha.
o
No te lo puedo
confirmar, porque no oí la conversación.
o
Señor García, Carlos,
puede pasar.
o
El último cierra apaga
la luz, coge las llaves y cierra la puerta.
o Pintaron las paredes,
cambiaron el suelo, y quedaron encantados.
o
Antes de que salgáis de
clase, coged el almuerzo.
o
Mañana, por favor, venid
temprano.
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